En un contexto de creciente vulnerabilidad al cambio climático, las islas del Caribe buscan soluciones para garantizar la sostenibilidad de sus sistemas agrícolas y pesqueros, altamente expuestos a fenómenos climáticos extremos. Del 4 al 6 de septiembre de 2024, Barbados fue sede de un seminario regional sobre seguros agrarios y pesqueros, organizado por la Organización de Estados del Caribe Oriental (OECO) y la cooperación española a través de la FIIAPP. Este evento reunió a representantes ministeriales del Caribe y expertos de Europa y África para intercambiar experiencias y explorar las mejores estrategias para implementar sistemas de seguros agrarios en los países caribeños. A este evento acudieron representantes del CEIGRAM, de ENESA, de Agroseguro y del Consorcio de Compensación de Seguros que, utilizando como ejemplo el sistema de seguros agrarios español, contribuyeron al desarrollo de soluciones adaptadas a la región.
El Caribe, una región con una alta vulnerabilidad a los efectos del cambio climático, enfrenta desafíos cada vez mayores para la agricultura y la pesca. El incremento en la frecuencia e intensidad de fenómenos climáticos extremos como huracanes, sequías o inundaciones y erupciones volcánicas ha puesto en peligro la seguridad alimentaria y el bienestar económico de los pequeños agricultores y pescadores.
En respuesta a este escenario, los seguros agrarios han surgido como una herramienta fundamental para mitigar los efectos de estos desastres, proporcionando a los agricultores un mecanismo para estabilizar sus ingresos y protegerse de las pérdidas económicas. Sin embargo, el desarrollo de estos sistemas es aún incipiente en muchos países del Caribe. Aquí es donde el modelo español de seguros agrarios, tras 45 años desde su implementación, puede servir como ejemplo.
El modelo español de seguros agrarios, presentado por representantes de ENESA, de Agroseguro y del Consorcio de Compensación de Seguros, ha sido reconocido como uno de los más avanzados y eficaces a nivel global. Este sistema, basado en la colaboración público-privada, ha logrado proteger a los agricultores y ganaderos frente a los numerosos riesgos a los que su actividad se ve sometida.
Isabel Bardají, directora del CEIGRAM, subrayó que el sistema español ha demostrado que es posible construir un esquema sostenible y eficiente de seguros agrarios que no solo proteja a los productores, sino que también promueva la resiliencia ante el cambio climático. Gracias a este avanzado sistema de seguros, los agricultores españoles puedan mitigar sus pérdidas en caso de sufrir eventos climáticos extremos.
En el seminario, Ana Tarquis, subdirectora del CEIGRAM, enfatizó el papel de la tecnología y el análisis de datos para mejorar la eficiencia del sistema de seguros. La introducción de herramientas como el análisis de series temporales y el uso de índices de vegetación y de imágenes satelitales no solo ha permitido una mejor evaluación del riesgo, sino que también ha facilitado una rápida y justa compensación a los productores afectados.
La participación del CEIGRAM en el seminario regional en Barbados ha destacado la importancia de los seguros agrarios como una herramienta clave para la gestión de riesgos en el Caribe. Por otra parte, también ha puesto de manifiesto las dificultades de implementar un sistema de seguros agrarios en caso de siniestros catastróficos y sistémicos. A través de la experiencia española, el seminario ha demostrado que es posible construir un sistema de seguros eficiente y adaptado a las particularidades de cada región, aunque basado en la cooperación de todos los países.
El cambio climático seguirá siendo una amenaza importante para la agricultura en el Caribe, y el desarrollo de un sistema de seguros agrarios será crucial para garantizar la sostenibilidad del sector. La colaboración público-privada, la innovación tecnológica y la cooperación regional son los pilares que pueden hacer que el Caribe logre implementar un sistema de seguros resiliente y adaptado a sus necesidades.